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miércoles, 9 de febrero de 2011

Gente que no

(Publicado en La Tercera, el 9/02/11)

Cuando Videla decía: “los desaparecidos están en el exterior”, nos tomaba por boludos (...)Y Alfonsín nos tomó por boludos cuando les dijo “héroes de Malvinas” a los carapintadas, y nos tomó por boludos cuando dijo “la casa está en orden”. Y Menem se hartó de tomarnos por boludos (...) Menem y los Yoma y María Julia Alsogaray y los que mataron a Cabezas y los que suicidaron a Yabrán (...)Los que volaron la AMIA, esos –muy especialmente esos– nos tomaron por boludos. Y quienes los cobijan, quienes deberían descubrirlos y encarcelarlos y no lo hacen, esos, día a día, cada día que pasa un poco más, nos toman por boludos. Porque eso es lo que somos, porque al fin sabemos lo que somos: somos el país de los boludos.
                                                                   José Pablo Feinman (de “El país de los boludos”, 1999)

No es una costumbre atribuible específicamente a la clase política aquello de aglutinar, sin criterio alguno, a una amplia cantidad de personas y hablarles como si fueran una masa homogénea. No. El resto de los mortales pecamos de la misma conducta. Y le digo más: a falta de un vasto auditorio al que dirigirnos, casi siempre hablamos en tercera persona del plural y nos excluimos del denominador común, muchas veces, erróneamente utilizado. 
   Hablar de la gente es un claro ejemplo de lo anteriormente expuesto. Un calificativo con cierta negatividad que nosotros mismos le cargamos. Porque uno no dice -usted lo sabe- “la gente es copada”. Uno dice, parafraseando a nunca sabremos quién, “la gente es mala y comenta”. Y en ese clásico, histórico y vulgar dicho, vomita lo sospechado: uno no se siente parte de la gente. No, señor. Uno no es parte de la gente. ¿Cómo serlo, si la gente habla boludeces?
   “Ojo que la gente ahora está apoyando a la Presidenta”, escuché decir a una señora en el tren, hace unos días. “Bueno, vos viste cómo es la gente”, le contestó su acompañante, con una complicidad que parecía implícita, pero no sólo para la señora, sino para el resto de los que estábamos ahí, esperando que se cierre de una vez la puerta en Temperley, así dejaba de entrar la gente. Esa complicidad argenta connotaba que la gente es de determinada manera: boluda, panqueque, manipulable, que-apoya-a-cualquiera. Y no es casualidad la reflexión disfrazada de comentario banal: la gente pidió a los milicos, la gente se convenció de que íbamos ganando en Malvinas, la gente creyó que la casa estaba en orden, votó a Menem y a De la Rúa, aplaudió a Duhalde y se tragó que si depositó dólares, iba a recibir dólares. La gente subestimó a Kirchner, puteó a Cristina y se solidarizó con el campo. La gente lloró y se movilizó por la muerte del mismo que había subestimado. La gente llena 32 Luna Park para ver a Arjona, gasta 2 lucas para ver a Paul Mc Cartney, se va 15 días de vacaciones a Pinamar y se queja de que la plata no alcanza. La gente tiene miedo, quiere cagar más alto que el culo, se enamora del Che y después le pide que se afeite la barba. La gente mira a Tinelli (y a todas sus repetidoras), maneja cada vez peor y es sucia. La gente tiene hambre, vota cualquier cosa y lee mucho Clarín.       
    Así es la gente, ¿usted vio? Una barbaridad, la gente. Una suerte que ni usted ni yo seamos parte de la gente. No sea cosa que tengamos que hacernos cargo de cosas que, nosotros, seríamos incapaces de hacer. Cosas que, inexplicable y compulsivamente, suele hacer la gente.
 

11 comentarios:

  1. Tal Cual Naty!!! Brillante semblanza. Tenés razón asi actúa la gente jajaja.

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  2. Muy bueno Na, excelente.
    El problema es que hace ya muchos años se dejó de hablar del pueblo para hablar dela gente. Porque el pueblo somos todos y la gente siempre son los demás.

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  3. ¡Gracias a ambos!

    Pablo, si hubieses dicho antes aquello del Pueblo y la gente, lo hubiera agregado a la nota, ja!

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  4. Nati como ya te dije "muy bueno", me encantó, muy cierto tambien el comentario de Pablo, ahi esta la diferencia, una cosa es el pueblo y otra cosa es la gente.
    Y que le vamos a hacer, asi son ellos, asi es la gente !!!

    saludos
    Leo

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  5. Doblemente gracias, Leo. Por tus palabras y por haberlo compartido en tu Facebook. Beso!

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  6. Esta gente de mierda que no entiende al pueblo.
    Te lo digo como ciudadano viste.
    Seguí me encanta leer lo tuyo.

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  7. sin palabras, solo te digo que me encantó... Sos una fenómena!!!
    T.C.

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  8. "El ciudadano Kane", de Wells, Kike =)

    T.C, gracias por ser como sos :)

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  9. Me gusta tu estilo de escribir sobre frases de canciones populares. Me gusta el tema que publicaste, comparto el concepto. Pero me parece innecesario dejar traslucir tu ideología en un tema "universal" (que es común a todos").
    Y, otra cosas linda de la página, son las recomendaciones literarias que hacés. Un beso.
    Darío de La Plata.

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  10. Gracias, "Darío de La Plata", por leerme y por tus palabras!!! Alguna vez, un docente de la facultad me dijo que la ideología está presente en absolutamente todo lo que uno hace y, por supuesto, en lo que escribe. Incluso, en la ficción, en la literatura. Uno baja línea casi inconcientemente (o no), con sus expresiones, sus modismos... Es medio inevitable no traslucirla. No es una justificación, es una aclaración de lo que a mi me pasa cuando escribo. ¡Beso grande y gracias de nuevo! :)

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